VISITA DEL PRESIDENTE JAVIER LAMBAN Y DEL CONSEJERO DE EDUCACIÓN FELIPE FACI A LA IGLESIA DE LA MANTERÍA

El Gobierno de Aragón reafirma su compromiso con la restauración de los frescos de la iglesia de la Mantería

El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha reafirmado este miércoles, en su visita a la iglesia de la Mantería de Zaragoza, el compromiso del Ejecutivo autonómico con este enclave patrimonial, en el que la Dirección General de Patrimonio Cultural actuará para garantizar la situación óptima del edificio a la hora de iniciar la restauración de las pinturas murales. De esta manera, y tal y como se acordó con el Ministerio de Cultura y Deporte, el Gobierno aragonés acometerá los trabajos pertinentes para que el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE) pueda ejecutar las obras de restauración necesarias en este enclave que, ha recordado Lambán, alberga unos frescos de Claudio Coello “de inmenso valor”. La restauración se llevará a cabo mediante un convenio  a tres partes, con una cesión de la propiedad al IPCE de 50 años.

La iglesia de la Mantería, declarada Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, está considerada como uno de los más interesantes ejemplos de la arquitectura barroca en Aragón, de gusto italianizante en su composición, aunque sin abandonar la tradición constructiva local en ladrillo. Alberga además uno de los conjuntos murales más importantes del barroco de finales del siglo XVII realizados por el excelente pintor madrileño Claudio Coello y su discípulo Sebastián Muñoz al estilo de los cuadraturistas italianos. Coello fue pintor de Corte, así como uno de los más destacados fresquistas del siglo XVII.

En 2021, la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón encargó un estudio de diagnóstico estructural del edificio, requisito imprescindible para la realización de la restauración del conjunto pictórico mural. Además, técnicos del IPCE han visitado en varias ocasiones el enclave para poder encarar “próximamente” las obras de restauración del conjunto pictórico mural, ha explicado Lambán. Mientras el Gobierno aragonés actúa para garantizar la situación óptima mediante la colocación de canaleras y otros sistemas para evitar los daños de las humedades, el IPCE podrá desarrollar los estudios previos de las pinturas, necesarios para llevar a cabo la restauración.

Estos trabajos, con un presupuesto estimado de unos dos millones de euros, irán encaminados a detener los procesos de deterioro de las pinturas murales, consolidar tanto los morteros como la capa pictórica y recuperar el valor artístico del conjunto pictórico para la ciudadanía, usando unos criterios estrictos de mínima intervención y respeto absoluto al original.

Previamente, el Gobierno de Aragón (en colaboración con Ibercaja) ya financió unas obras de consolidación a consecuencia, que finalizaron en 2010.