El artista turolense Fernando Romero presenta en la Galería A del Arte la exposición
Fernando Romero plantea su exposición como un paseo. Una peregrinación (o quête) que remite muy directamente a Stalker, de Tarkovski. La ‘Zona’ a la que se encaminan los protagonistas de esa película es uno de esos espacios vacantes a los que se dirige el Deseo. Deseo que Eugenio Trías, el filósofo del límite (o de las lindes), consideraba clave de lectura para Stalker y para el resto de la filmografía de Tarkovski. Con un criterio muy diferente, Adorno pensó que el arte moderno se deberá dirigir a una tierra de nadie, sustituta de la tierra habitable. Pero el tiempo y la intemperie han redimido extrañamente al arte, creando una belleza que escapa de la impostura por una vía casi mística, señalizada por las ruinas de la modernidad, camino de fértiles ‘nadas’. Por eso, Fernando Romero me habla de esos “paisajes mutantes” de Stalker, “que van cambiando y redirigiendo a los errantes”. Y de las similitudes de ese peregrinar con el proceso plástico: “las formas del paisaje van cambiando en función de la composición y la búsqueda de un objetivo por parte del artista”.
Fernando Romero (Teruel, 1983) es Licenciado en Bellas Artes por la Facultad de San Carlos, Universidad Politécnica de Valencia, donde realizó el máster en Producción Artística con el proyecto “Convivencias. Sobre la coexistencia de valores tradicionalmente opuestos en la pintura”. Ha recibido diferentes premios y becas de los cuales cabe destacar el Premio BMW de Pintura a la Innovación, el Premio Ars o la Beca Diputación de Teruel para la formación de artistas. Su trabajo se ha mostrado en ARCO, en la Casa de Vacas (Madrid), en el Palacio de Sástago (Zaragoza) o en el Museo de Huesca entre otros.
La exposición Paseo hasta la linde de Fernando Romero se puede visitar del 5 de mayo al 3 de junio en la Galería A del Arte de Zaragoza en horario de miércoles a viernes de 17:00 a 21:00 horas y los sábados de 11:00 a 14:00 h. La entrada a la exposición es gratuita.