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Lorena Cosba presenta su nueva exposición, titulada Asombrario, en la sala Juana Francés de Zaragoza. La muestra estará abierta al público hasta el 31 de enero y se encuentra en la Casa de la Mujer, un espacio comprometido con la visibilización del talento artístico femenino.
La exposición propone un viaje a través de imágenes y objetos que combinan naturaleza, historia y narrativa ficticia. Con esta obra, Cosba rinde homenaje a las mujeres que, en el siglo XIX, se vieron obligadas a firmar con iniciales, como el personaje ficticio de Genoveva Grau, creado por la fotógrafa para simbolizar a todas ellas.
El misterio de las iniciales G.G. y el archivo de la Ribagorza
La historia que sustenta Asombrario comenzó en 2019, cuando Lorena Cosba emprendió un proyecto de investigación sobre las primeras fotógrafas de Aragón. Su objetivo era rescatar los trabajos olvidados o no acreditados de mujeres que, por las limitaciones de su época, quedaron relegadas a un injusto anonimato.
Durante una consulta en la Fototeca de Huesca, Cosba encontró una caja que contenía ferrotipos, un formato fotográfico propio del siglo XIX. Los objetos estaban firmados únicamente con las iniciales G.G. Este hallazgo despertó su curiosidad, llevándola a una profunda búsqueda en archivos y bibliotecas, así como a recorrer el Valle de Isábena y otros rincones de la Ribagorza.
El contenido de la caja incluía fotografías de paisajes y retratos, láminas botánicas, un mapa de 1885 con zonas marcadas y una libreta con apuntes deteriorados. Estos elementos se convierten en el eje central de la exposición, donde Cosba entrelaza la ficción de Genoveva Grau con su propio trabajo artístico.
Naturaleza y memoria en el arte de Lorena Cosba
Asombrario está inspirada en el rico entorno natural del Valle de Isábena y en las plantas autóctonas de la Ribagorza, elementos presentes tanto en las fotografías como en los bodegones que conforman la muestra. La obra invita al espectador a reflexionar sobre la invisibilidad histórica de las mujeres en el ámbito artístico y científico, así como sobre el vínculo entre naturaleza y memoria.
La exposición, que se inaugura hoy a las 19:00 horas, utiliza el personaje de Genoveva Grau como un símbolo de todas las mujeres que contribuyeron al patrimonio cultural y que, sin embargo, permanecieron en el anonimato. Según Cosba, este acto de rescate no solo es un homenaje, sino también una crítica a las barreras que enfrentaron estas mujeres en su tiempo.
Quienes visiten Asombrario podrán explorar una narrativa única, construida a partir de fotografías, documentos y objetos que combinan historia y creación contemporánea. La muestra permanecerá abierta hasta el 31 de enero, ofreciendo una oportunidad para conocer el trabajo de Lorena Cosba y reflexionar sobre el papel de las mujeres en la historia de la fotografía y la botánica.