El Belén de Plaza del Pilar ha iniciado su montaje en Zaragoza, un evento esperado que atrae a visitantes y locales cada año. La instalación ha comenzado hoy 29 de octubre con el vallado de la bandeja central de la plaza, así como la preparación del suelo mediante el cubrimiento con plástico y el esparcimiento de arena. El Belén, cuya inauguración está prevista para el 29 de noviembre por la tarde, será accesible para el público hasta el 7 de enero, ofreciendo un recorrido lleno de detalles tradicionales y figuras a tamaño real que evocan la esencia navideña.
Coordinación de servicios y elementos del Belén de Plaza del Pilar
La instalación del Belén de Plaza del Pilar implica una compleja coordinación de distintos servicios municipales, entre ellos Parques y Jardines, Zaragoza Cultural, las Brigadas Municipales de Arquitectura y FCC. Los equipos están colaborando en la colocación de las 56 figuras humanas de tamaño real que darán vida a escenas de la época. Asimismo, este año se contará con la recreación de animales, como ovejas, cabras, perros, patos y ocas, que sumarán cerca de un centenar de figuras para enriquecer la experiencia de los visitantes.
Entre las construcciones que se montarán se encuentran el Portal de Belén, con las figuras del Niño Jesús, la Virgen María y San José, el Palacio de Herodes y el Zoco de Mercaderes. También se representa un homenaje a los oficios tradicionales aragoneses, incluyendo la herrería, recientemente renovada, un taller de alfarería, y una escena de matacía. Para los habitantes de Zaragoza y los turistas que visitan la ciudad, esta recreación detallada es una muestra única del patrimonio cultural local y de la historia aragonesa.
Espacios y distribución del Belén de la Plaza del Pilar
El Belén de Plaza del Pilar ocupa una superficie total de 1.019 metros cuadrados, mientras que su perímetro abarca 1.240 metros cuadrados. La distribución del espacio ha sido diseñada para facilitar el recorrido de los visitantes y optimizar el flujo de personas. Se ha reservado un área de 396 metros cuadrados para arena, 250 metros cuadrados para césped, 210 metros cuadrados para caminos y un lago de 37 metros cuadrados, elementos que ayudan a construir una atmósfera realista y atractiva.
El montaje del Belén incluye la plantación de árboles, arbustos y plantas pequeñas. Los árboles de mayor tamaño provienen de los viveros municipales, donde son cuidados de un año para otro y se replantan al finalizar la exposición. Esta reutilización de los recursos naturales responde al compromiso con la sostenibilidad de los servicios municipales de Zaragoza, optimizando los elementos vegetales empleados.
Este Belén navideño se ha convertido en una tradición destacada en Zaragoza y en un símbolo de la cultura navideña en la ciudad. Gracias a la colaboración de los distintos servicios municipales y a la incorporación de figuras y elementos tradicionales, la ciudad da la bienvenida a la Navidad con un evento que conserva sus raíces y crea una experiencia única para sus visitantes.