
Las señales de navidad más divertidas de Zaragoza se encuentran en este edificio público
En pleno centro de Zaragoza, la Navidad ha tomado una forma inesperada y creativa gracias a las señales que decoran la entrada del Servicio Municipal de Movilidad Urbana, en la calle Albareda 4. Este edificio público, con siglos de historia a sus espaldas, se ha convertido en un punto de interés único que combina humor, ingenio y espíritu navideño.
Los transeúntes que se acercan al lugar encuentran señales de tráfico transformadas para la ocasión. Una de ellas prohíbe circular en camellos, excepto si se trata de los Reyes Magos; otra permite estacionar solo a Papá Noel o limitan el uso de señales acústicas a villancicos. Incluso hay mensajes que promueven el transporte público, recordando a los ciudadanos que durante la Navidad también es buena idea usar el autobús.
En un guiño al uso seguro del tranvía, una señal adapta las indicaciones habituales con el mensaje «En Navidad para, mira, pasa«, mientras que otra, decorada con un árbol navideño, simplemente desea «Feliz Navidad» a quienes pasean por la zona. Incluso una valla de obra se ha unido al espíritu de las fiestas con el mensaje: «Feliz Navidad y próspero año nuevo, Movilidad Urbana del Excelentísimo Ayuntamiento de Zaragoza«.
Historia y encanto: el edificio que enmarca la Navidad en Zaragoza
El espacio donde se encuentran estas señales tiene un pasado fascinante que aporta aún más interés a la visita. Este edificio, hoy sede del Servicio Municipal de Movilidad Urbana, comenzó su vida como el convento de las Carmelitas Descalzas en 1588. Con los años, ha pasado por diversas etapas, desde cuartel militar hasta sede del Gobierno Militar de Zaragoza, antes de convertirse en propiedad municipal.
La arquitectura del edificio combina elementos tardorrenacentistas con un estilo academicista del siglo XIX. Sus fachadas de ladrillo visto y el claustro central, herencia de su época conventual, destacan en el entorno urbano. Actualmente, rodeado de jardines en tres de sus fachadas, se alza como un testimonio de la rica historia de la ciudad.
Un rincón lleno de humor y tradición
Las señales navideñas de Albareda 4 no son solo una curiosidad visual, sino una muestra del carácter alegre y creativo de Zaragoza. Transforman un elemento cotidiano como las señales de tráfico en una experiencia festiva que arranca sonrisas a todos los que pasan por allí. Este tipo de iniciativas convierten a la ciudad en un lugar especial para disfrutar de la Navidad desde una perspectiva diferente y entretenida.