El mercado Central celebra su 120 aniversario con diversas actividades

El 24 de junio de 1903 abría sus puertas en Zaragoza el Mercado Central o de Lanuza para sustituir al tradicional que cada día se celebrara en la antigua plaza del mercado. El próximo sábado, 24 de junio, se cumplen 120 años de esa jornada histórica y la Asociación de Detallistas del Mercado Central han preparado en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza una serie de actividades para conmemorar la fecha. El programa de actos se va a celebrar a lo largo de esta semana y contará con música, gastronomía y una exposición en la que se podrá conocer la historia de esta lonja zaragozana que en los últimos años ha sufrido una transformación profunda.

La primera de las citas será esta misma tarde a partir de las 17:00 horas en la planta sótano del Central. En ella, a través de un acuerdo firmado con Zaragoza Cultural, se producirá un duelo de chefs de la ciudad con el cocinero francés Nicolás Lormeau, estrella Michelín en Pau, Francia. El jueves 22 de junio se inaugurará la exposición «120 años del Mercado Central a través de su gente» que se podrá disfrutar hasta el 1 de julio en la planta sótano del Mercado Central. En este caso, se mostrarán elementos y fotografías pertenecientes al archivo, algunas con más de 50 años, de la Asociación. El horario para poder visitar la muestra será de 10:00 a 14:00 horas.

El sábado 24 de junio, día del cumpleaños, el Mercado Central se llenará de música, animación, regalos y otras muchas propuestas. Este será el día del Mercado en el que los detallistas interactuarán con los clientes y se convertirá en una fiesta. Las jotas también se convertirán en protagonistas durante toda la mañana con una ronda jotera que se celebrará por los pasillos de la lonja zaragozana.

Historia Mercado Central

El Mercado Central de Zaragoza fue diseñado en 1895 por el arquitecto aragonés Félix Navarro Pérez con el objetivo de sustituir al tradicional que se realizaba al aire libre en la antigua plaza del mercado. Lo encargó la Sociedad Nuevo Mercado de Zaragoza y en 1903 terminaron los trabajos. Es monumento histórico nacional desde el año 1978, y Bien de Interés Cultural desde 1982.

El edificio, de planta rectangular, tiene estructura de hierro y un diseño funcional y armonioso. Toda la estructura descansa sobre un semisótano que servía de almacén y que al exterior presenta la imagen de un zócalo, y que todavía sigue teniendo la misma función. El Mercado Central es uno de los pocos ejemplos que quedan de lonjas modernistas de principios del siglo XX de la arquitectura española. En su diseño combina la piedra y la arquitectura del hierro y de cristal. Las portadas presentan elementos neoclásicos, como galerías de arcos, y alegorías de la agricultura, la caza, la pesca y el transporte. Los capiteles de las columnas de hierro tienen formas originales, como cestos, hojas de acanto, palmas neoclásicas y frutas en racimo.

Con 120 años de historia, el Central de Zaragoza reinauguró sus actuales instalaciones el pasado 6 de febrero de 2020, tras meses de obras. Los trabajos, que consistieron en la remodelación integral de la lonja, le han dado al Mercado una imagen más moderna, más accesible y adaptada a las necesidades actuales de compra. La lonja ofrece a los visitantes 78 puestos, 74 de alimentación y cuatro de restauración. La distribución de los espacios de venta directa son 13 dedicados a la carne, 11 a alimentación variada, 7 pollerías y platos precocinados, 12 pescados y congelados, 13 frutas, verduras y flores y 3 de menuceles. El Mercado Central de Zaragoza es una puerta abierta al público con una doble vertiente, la de ser el mercado de abastos más importante de la ciudad y un polo de atracción turística que no deja indiferente a nadie.

Actualmente, casi a diario, trabajan en el Mercado Central más de 300 personas, distribuidos entre detallistas, trabajadores de los puestos, administración, gerencia, limpieza y zona de restauración. Abierto de lunes a sábado, en lo que a venta de productos se refiere, y el fin de semana, sección de restauración, el número de personas que pasan por sus pasillos al año supera los 2,5 millones de personas.