Visitas guiadas al Mercado Central de Zaragoza
El Mercado Central de Zaragoza organiza durante los días de Navidad varias visitas guiadas gratuitas, a través de las cuáles poder descubrir todo acerca del mercado, desde su historia a su arte, recorriendo espacios que habitualmente no están abiertos al público. Las visitas terminarán con un aperitivo para brindar por el año nuevo.
Las visitas guiadas al Mercado Central de Zaragoza tendrán lugar los días 18, 21, 22, 28, 29 de diciembre y 3, 4 y 8 de enero, con salida a las 12:30 h. desde el punto de información ubicado en la parte central del mercado. Las visitas se realizarán en grupos de un máximo de 20 personas, y siempre mediante inscripción previa gratuita.
Las inscripciones podrán realizarse a través del teléfono 658774682 de lunes a viernes en horario de 9 a 14 horas y de 17:30 a 20 horas, así como en el puesto de atención al cliente en el mercado en horario de 10 a 14 horas y de 17:30 a 20 horas de lunes a viernes y de 9 a 14 horas los sábados. Cada petición podrá inscribir a un máximo de 2 personas. Los peticionarios aceptan participar en la visita y si precisan anular, lo comunicarán con 24 horas de antelación para permitir a otras personas disfrutar de la visita.
El Mercado Central de Zaragoza, también conocido como Mercado de Lanuza, fue originalmente diseñado en 1895 por el arquitecto aragonés Félix Navarro Pérez para sustituir al tradicional que se realizaba al aire libre en la antigua Plaza del Mercado. Su construcción se prolongó hasta 1903, año en que fue inaugurado. El edificio, de estilo modernista, tiene una planta rectangular y un diseño funcional y armonioso. En sus portadas, se pueden ver elementos neoclásicos, como arcos, esculturas alegóricas de los productos que allí se venden o retículas de forja. Las columnas de hierro de su interior incluyen capiteles con formas originales, como cestitos, hojas de acanto, palmas neoclásicas y frutas en racimo. Todos éstos elementos han sido respetados durante el reciente proceso de reforma, limpiando y arreglando aquellos en los que hiciera falta, logrando de ésta forma que el Mercado Central de Zaragoza no pierda su esencia que le ha convertido en uno de los espacios más emblemáticos de Zaragoza.