
Cinco fiestas de la provincia de Zaragoza que no te puedes perder en el mes de agosto
Agosto en la provincia de Zaragoza es sinónimo de fiesta. Sus pueblos y ciudades se preparan para celebrar tradiciones arraigadas que se transmiten de generación en generación. Durante este mes, un mosaico de colores, sabores y sonidos inunda las calles, creando un ambiente festivo que atrae tanto a locales como a visitantes. Desde antiguas tradiciones hasta joviales encuentros gastronómicos, las celebraciones zaragozanas ofrecen una experiencia única para sumergirse en la rica cultura aragonesa.
En este recorrido por algunas de las fiestas de agosto en la provincia de Zaragoza, descubriremos cinco celebraciones que destacan por su singularidad y arraigo popular. Cada una de ellas es una ventana a la historia, las costumbres y el carácter de los pueblos que las acogen.
1. San Roque en Calatayud El 16 de agosto, Calatayud celebra la festividad de San Roque, una de las más importantes del municipio. Durante estas fiestas, donde las peñas bilbilitanas son las protagonistas, se llevan a cabo procesiones religiosas en honor al santo, así como verbenas y actividades culturales que atraen tanto a locales como a visitantes. La festividad es conocida por su ambiente festivo y la participación activa de la ciudad a través de sus peñas.

2. Fiestas de San Roque en Calamocha El mismo día, el 16 de agosto, Calamocha celebra sus fiestas, donde el acto principal es el Baile de San Roque. Esta festividad destaca por el baile que se realiza en la plaza principal del pueblo, donde se congregan personas de todas las edades para disfrutar de la música y el ambiente festivo. El evento es una tradición arraigada en la localidad y es esperado con entusiasmo cada año. Tiene su origen en el año 1885, cuando la localidad sufrió una epidemia de cólera y le ofreció al santo un baile por su protección, donde se incluyen comentarios y ruegos en forma de poemas llamados «dichos».

3. Cipotegato en Tarazona El 27 de agosto, Tarazona celebra el Cipotegato, el acto principal de sus fiestas en honor a San Atilano y, sin duda, uno de los más singulares de la provincia. Durante esta celebración, un personaje vestido de arlequín, conocido como el Cipotegato, recorre las calles del pueblo mientras los asistentes le lanzan tomates. Esta tradición, que tiene sus raíces en el siglo XVIII, es un evento muy esperado que atrae a miles de visitantes y es considerado un símbolo de la ciudad turiasonense.

4. Fiesta “Migas y Vino en Teja” en Romanos El 26 de agosto, en el marco de las fiestas en honor a San Bartolomé, Romanos celebra la Fiesta “Migas y Vino en Teja”. Durante este evento, los vecinos y visitantes se reúnen para degustar migas, un plato tradicional de la región, acompañado de vino servido en tejas. La celebración es una oportunidad para disfrutar de la gastronomía local y fomentar la convivencia entre los vecinos y visitantes.

5. Romería de San Mamés en Murero El 17 de agosto, Murero celebra la Romería de San Mamés. En esta festividad, los habitantes del pueblo y sus alrededores participan en una procesión hasta la ermita del santo, donde se llevan a cabo actos religiosos y festivos. La romería es una ocasión para reforzar los lazos comunitarios y disfrutar de un día de convivencia en un entorno natural. La singualaridad de esta fiesta es que los participantes en la procesión bailan de espaldas y de frente al santo durante el kilómetro que separa Murero de la ermita de San Mamés.
