
La UME se suma a las labores de ayuda en las localidades afectadas
El Gobierno de Aragón ha activado la fase de emergencia en Nivel 2 del Plan Especial de Protección Civil por Fenómenos Meteorológicos Adversos (Procifemar) tras los daños ocasionados por las intensas tormentas registradas el pasado viernes en varios municipios de la comarca de Campo de Belchite. Esta decisión, anunciada por el consejero de Hacienda, Interior y Administración Pública, Roberto Bermúdez de Castro, permite la intervención de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en las labores de ayuda a las localidades más afectadas.
La activación del Nivel 2 se produce después de comprobar la magnitud de los destrozos provocados por las precipitaciones, que dejaron hasta 116 litros por metro cuadrado en menos de siete horas en algunos puntos. Aunque no se han registrado víctimas, los daños materiales son considerables. Las infraestructuras, caminos rurales y redes de abastecimiento de agua han sufrido graves desperfectos, lo que ha motivado una respuesta institucional más amplia.
La UME ayudará en las zonas afectadas tras las tormentas
Con esta nueva fase del plan de emergencias, la UME ayudará en las zonas afectadas con medios humanos y técnicos especializados. Su despliegue se producirá desde primeras horas del martes y se coordinará con el 112, Infoar y las brigadas forestales. El objetivo es acelerar las tareas de recuperación y devolver la normalidad lo antes posible a los municipios damnificados.
El Ejecutivo autonómico ha anunciado también el refuerzo inmediato de efectivos ya desplegados. Se duplicará el número de personas en el terreno y se contratarán medios externos, incluyendo maquinaria pesada como retroexcavadoras, camiones y palas. Esta acción conjunta pretende solventar con rapidez los problemas ocasionados en caminos, redes de agua y otras infraestructuras básicas que han quedado inutilizadas por las lluvias.
Según el consejero Bermúdez de Castro, el contexto de riesgo por incendios forestales limita el uso de ciertos recursos humanos del operativo Infoar. Este motivo ha sido clave para solicitar el apoyo de la UME, cuyas capacidades logísticas son esenciales en un escenario de estas características.
Colaboración interinstitucional para restablecer servicios
La UME ayudará en las zonas afectadas en estrecha colaboración con los distintos servicios de emergencias autonómicos y locales. Desde el Gobierno de Aragón se ha insistido en que esta actuación se articula bajo un modelo de coordinación total entre administraciones. La prioridad es restablecer los servicios básicos y asegurar el acceso a los núcleos rurales incomunicados.
Las tareas que se van a ejecutar en los próximos días son de gran envergadura. Incluyen la reparación de caminos, la restauración de redes de abastecimiento, y la limpieza de zonas arrasadas por las corrientes de agua. Además, se hará un seguimiento continuo de la evolución meteorológica para evitar nuevas incidencias en un momento especialmente delicado.
Las autoridades han recordado que este tipo de fenómenos meteorológicos extremos, aunque difíciles de prever, exigen una respuesta rápida y eficaz. La movilización de todos los recursos disponibles, incluida la UME, representa un paso necesario para hacer frente a las consecuencias de unas lluvias que han superado las previsiones iniciales.
Con esta medida, el Gobierno de Aragón refuerza su compromiso con la protección civil y la respuesta ante emergencias, priorizando la seguridad y el restablecimiento de la vida cotidiana en los municipios más afectados por las tormentas.