Rafael Alvarez «El Brujo» galardonado con la Butaca de Honor del Teatro de las Esquinas

El Teatro de las Esquinas ha concedido al actor y dramaturgo Rafael Álvarez ‘El Brujo’ la “Butaca de Honor del Teatro 2022”, un reconocimiento del Teatro zaragozano a su trayectoria, talento y relevancia en el ámbito escénico nacional y a su vinculación tanto a la capital aragonesa como al propio Teatro de las Esquinas.

El acto de entrega de este reconocimiento tendrá lugar el próximo viernes 25 de noviembre en el estreno en la capital aragonesa de su obra ‘Los Dioses y Dios’, y de la que ofrecerá tres funciones durante el fin de semana.

El reconocimiento tomará forma de la mano del artista aragonés Oscar Sanmartín, autor del original trofeo que con tal motivo ha diseñado y realizado. Igualmente, una butaca del Teatro de las Esquinas será identificada con el nombre del artista homenajeado.

Los Dioses y Dios con El Brujo en el Teatro de las Esquinas

‘Los Dioses y Dios’ es el último trabajo que pone en escena Rafael Álvarez ‘El Brujo’ y llega a Zaragoza del 25 al 27 de noviembre en el Teatro de las Esquinas, con tres funciones, a las 20:30 h. los días 25 y 26 y a las 18 h. el domingo 27 de noviembre.

Dilucidar el misterio de la vida es el anhelo incesante de toda sabiduría. De momento no hay ciencia que pueda iluminar el origen desconocido, o el destino final de la existencia. Por eso existe el arte, la metáfora, el cuento, el teatro, el relato.

El verdadero interés de los mitos griegos es que la cultura del mediterráneo hizo a sus dioses a su imagen y semejanza, algo que no había ocurrido en otras culturas. Los griegos eran más realistas y existía una relación entre los seres humanos y los divinos. Los griegos nos transportan a una época en que la relación con la madre tierra y el hombre era evidente, abierta y sin precedentes. La mitología nos deja apreciar la magia de los griegos, el brillo de ese mundo diferente, más vivo y animado. Un único mundo con una única búsqueda de lo esencial. Todas las búsquedas, una búsqueda. Todos los dioses, Dios.

Al fin y al cabo, nosotros, los hombres, llevamos toda la eternidad intentando averiguar y explorar una misma cosa: un sentido a nuestra existencia y un: ¿qué hay después? Verdaderamente no podemos decir que les vayamos a facilitar la solución, pero si podemos asegurarles el disfrute de la búsqueda.

En este trabajo de lujo hay amor, humor y una esencia: el teatro es vida y es, además, divertido. En este juego que va de los dioses a lo divino es donde podremos disfrutar de la elegancia del maestro Rafael Álvarez El Brujo y su dominio de las tablas, de esa mitología que ya hemos presentado como un mundo animado y apasionado.