Zaragoza cuenta con una nueva promotora de conciertos, que bajo el nombre de Laminero busca devolver la música en vivo a Zaragoza, con propuestas de bandas nacionales bandas que nunca han tocado en nuestra ciudad o que lo han hecho en contadas ocasiones. Su primera propuesta es el ciclo de conciertos ‘Laminero Presenta‘ que tendrá lugar durante mayo y junio en el Centro Cívico Almozara.
La puesta de largo será el próximo 22 de mayo con una propuesta local, Fresquito y Mango. Pop fresco y directo que va camino de convertirse en una referencia a nivel nacional. Las entradas para los dos pases que dará el grupo se agotaron en apenas unas horas.
El primer ciclo de conciertos de Laminero, de un total de seis, lo completarán Candeleros, banda madrileña que combina cumbia, merengue, dub o ritmos africanos y caribeños, el 28 de mayo. En junio abrirá la programación Casero, también de Madrid y que por primera vez visitará la ciudad con su pop intimista cotidiano. Dos de los talentos más prometedores del rap nacional, Elane y Sofía Gabbanna, presentarán sus respectivos shows el 12 de junio. Confeti de Odio, el proyecto musical de Lucas Vidaur, llegará a Zaragoza el 17 de junio. Este primer ciclo de conciertos se cerrará el 26 de junio con VVV [Trippin’you], trío madrileño neo-bakala que rinde culto al frío, al ruido, a la modernidad y a los parkings.
Los conciertos se celebrarán en el Centro Cívico La Almozara, con un aforo para 70 personas sentadas, donde se respetarán todas las medidas sanitarias y de seguridad pertinentes. Los conciertos serán a las 20 h., salvo en el caso de Fresquito y Mango, que habrá doble pase a las 18 h. y a las 20 h., y las entradas ya están a la venta en DICE.fm a un precio de 13,20 euros.
Laminero
El panorama musical español cuenta desde este año con una nueva promotora: Laminero. Detrás de esta iniciativa están tres jóvenes zaragozanos, Daniel Acirón, Manuel Cabeza y Lolo Aznar, cuyo objetivo es dar visibilidad a nuevas propuestas musicales y, de esta manera, poner su granito de arena para devolver la música en vivo a Zaragoza. Todo un reto en un momento especialmente difícil para el sector cultural como consecuencia de las restricciones derivadas de la pandemia.
“Queremos apostar por esos artistas que, debido a la pandemia, no han tenido espacio para presentar su directo”, explican los fundadores. Añaden que “nuestro objetivo es llegar a un público joven que durante la pandemia apenas ha tenido oferta cultural”. Las restricciones derivadas de la crisis actual han provocado descensos en la facturación a nivel nacional de más del 60% en el 2020 respecto del año anterior en este tipo de eventos. La provincia de Zaragoza pasó de facturar casi 8 millones de euros en 2019 a poco más de 3 millones en el 2020. No obstante, “confiamos en que pronto se relajen las restricciones y poder programar para audiencias más grandes”, señalan desde Laminero.
El nombre no está elegido al azar, puesto que laminero es un adjetivo utilizado en Aragón para definir a las personas que les gusta el buen dulce: “El nombre no es casual. Los tres somos de Zaragoza y utilizando este recurso subrayamos que queremos ofrecer una programación apetitosa, solo apta para paladares golosos que quieren descubrir nuevos sabores.” De esta manera, en sus carteles será habitual encontrar bandas que nunca han tocado en la ciudad o que lo han hecho en contadas ocasiones.