Cada año, la tarde del 13 de octubre las calles de Zaragoza se llenan de luz, devoción y esplendor en uno de los eventos más sobresalientes de las Fiestas del Pilar 2023: el Rosario de Cristal. Aunque este evento suele ser un tesoro guardado en el corazón de Aragón, su impacto y significado trascienden las fronteras de la región. En la tarde-noche del 13 de octubre, esta majestuosa procesión ilumina la ciudad, rindiendo homenaje a la Virgen del Pilar y conmemorando una tradición arraigada en la historia de la ciudad.
Orígenes del Rosario de Cristal de Zaragoza en el Siglo XIX
Los orígenes del Rosario de Cristal se remontan al siglo XIX, en concreto a comienzos de 1889, cuando se fundó la Real Cofradía del Santísimo Rosario de Nuestra Señora del Pilar. El presidente de la cofradía, José M. Pra y Duarte, tuvo la inspiración de transformar la procesión del rezo del Rosario en algo más espectacular y simbólico. Esta idea se basó en una tradición ya presente en Calatayud, que consistía en reemplazar las hachas y velas utilizadas en las procesiones por una colección de faroles que representarían cada parte de la oración del Rosario.
El Diseño Innovador de Ricardo Magdalena
Para llevar a cabo esta visión, se confió en el talento del arquitecto del Ayuntamiento, Ricardo Magdalena. Su creatividad dio lugar a una colección de faroles monumentales y de mano, que se distribuyen en carrozas que recorren las calles de Zaragoza durante el Rosario de Cristal. La construcción se realizó en dos etapas: primero, se crearon los faroles correspondientes a los Padrenuestros, Avemarías, Glorias y la Letanía; luego, se completaron los quince faroles monumentales que representan los Misterios del Rosario.
Un Espectáculo de Luz y Devoción
Desde su presentación en 1889, el Rosario de Cristal de Zaragoza ha dejado una impresión duradera en los corazones de quienes lo presencian. La procesión está compuesta por quince faroles monumentales que simbolizan cada uno de los Misterios del Rosario, junto con faroles de mano que representan las diferentes partes de la oración. Las vidrieras de los faroles, elaboradas por la casa Degrand de Burdeos, presentan colores específicos que varían según el tipo de misterio que representan.
Un Legado en Evolución
A lo largo de los años, el Rosario de Cristal ha evolucionado y crecido. Donaciones y restauraciones han enriquecido la procesión, añadiendo nuevos faroles y carrozas. La incorporación de tecnología, como la megafonía y la iluminación eléctrica en 1957 y 1969 respectivamente, ha llevado la tradición a nuevos niveles de esplendor. Aunque ha habido interrupciones en su realización en momentos excepcionales, como durante la Primera República española, la procesión ha persistido a lo largo de las décadas.
Un Museo para Contemplar el Esplendor
El Rosario de Cristal no se limita a ser una procesión anual, sino que también ha dejado su huella en el Museo de los Faroles y Rosario de Cristal. Este museo alberga las magníficas piezas utilizadas en la procesión, permitiendo a los visitantes sumergirse en la historia y el arte detrás de esta celebración única.
En resumen, el Rosario de Cristal es mucho más que una procesión; es un tributo a la fe, la devoción y la creatividad humana. Cada farol y cada vidriera son testimonios vivientes de una tradición que ha perdurado a lo largo de los años, cautivando a generaciones con su belleza y significado. En las Fiestas del Pilar 2023, Zaragoza volverá a iluminarse con el resplandor del Rosario de Cristal, un evento que une el pasado y el presente en un deslumbrante espectáculo de luz y espiritualidad.