Monseñor Don Carlos Escribano ha tomado posesión hoy de la Archidiócesis de Zaragoza en una jornada en una jornada llena de fe y emoción que ha comenzado a las 10:15 horas en la catedral del Salvador, donde ha tenido lugar el encuentro del nuevo Arzobispo con el nuncio apostólico de su Santidad, Bernardito Auza, y el administrador apostólico, Vicente Jiménez.
Tras la recepción de autoridades en el interior de la Seo, la comitiva se ha trasladado hasta la Basílica del Pilar, pero sin la procesión habitual. Una vez dentro del templo, el nuevo Arzobispo de Zaragoza se ha postrado a los pies de la Virgen y ha encomendado a la madre de Dios tanto su ministerio en la Archidiócesis de Zaragoza como las necesidades de toda la sociedad. Poco después, a las 11.00 horas, ha comenzado la misa estacional en el altar mayor de la basílica del Pilar.
Al comienzo de la celebración, el administrador apostólico Vicente Jiménez ha presentado la diócesis al nuevo obispo, mientras que el nuncio Bernardito Auza ha pedido que se mostraran las Letras Apostólicas del nombramiento al Colegio de Consultores y ha invitado al obispo electo, en nombre del Santo Padre, a que, con la mitra y el báculo —símbolos de su ministerio pastoral— se sentara en la Cátedra. De este modo ha tomado posesión de la sede monseñor Escribano.
Entre los veintidós obispos concelebrantes, se encontraban los cuatro obispos de las diócesis sufragáneas de Zaragoza: Julián Ruiz (Huesca), Eusebio Hernández (Tarazona), Ángel Pérez (Barbastro-Monzón) y Antonio Gómez (Teruel y Albarracín). También han estado presentes el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello; setenta sacerdotes, cuatro diáconos y diecisiete seminaristas.
Además de los presbíteros, religiosos y seglares que han representado a toda la Archidiócesis, junto a los miembros de los órganos consultivos, ha habido una destacada participación de autoridades civiles, políticas, académicas, militares y judiciales.
Al acto de toma de posesión han asistido veintidós obispos concelebrantes, entre los que se encontraban los cuatro obispos de las diócesis sufragáneas de Zaragoza: Julián Ruiz (Huesca), Eusebio Hernández (Tarazona), Ángel Pérez (Barbastro-Monzón) y Antonio Gómez (Teruel y Albarracín). También han estado presentes el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello; setenta sacerdotes, cuatro diáconos y diecisiete seminaristas. Además también ha habido una destacada participación de autoridades civiles, políticas, académicas, militares y judiciales.