¿Es buena inversión comprar furgonetas de segunda mano?

La inversión en una flota de furgonetas es una necesidad para muchas empresas y profesionales, debido a que pueden mantener sus negocios en marcha. Su correcto uso es lo que marca la diferencia entre el éxito y fracaso de un negocio. Pero al momento de elegir una furgoneta, siempre se piensa en qué es mejor: ¿una nueva o usada?

Casi siempre la primera opción siempre será la más ideal. Sin embargo, no todos los negocios tienen la posibilidad de adquirir un vehículo nuevo. Tampoco significa que las furgonetas de segunda mano sean una mala opción. Siempre que estén en buen estado, es una de las mejores decisiones para cualquier tipo de negocio.

Inniauto es una empresa especializada en la venta de furgonetas de segunda mano en Zaragoza, por lo que puedes entrar a su web y buscar los modelos que más te convengan. Hay una amplia gama de de modelos disponibles con garantía y diversas opciones de financiación que se adaptan a cada presupuesto y necesidad, tanto de las empresas como profesionales de diferentes sectores y gremios.

Lo mejor de comprar una furgoneta de segunda mano

Para las empresas y autónomos, la compra de una furgoneta de segunda mano se traduce en un menor gasto de inversión que el de una furgoneta nueva. La reducción del IVA es entre el 50 y el 100% del total del costo de este vehículo. Asimismo, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) como las furgonetas ronda el 35%, menos que el de otro tipo de vehículos.

De estas dos ventajas fiscales se unen las garantías de los concesionarios especializados en la venta de coches de segunda mano, razón por la cual en todo el año 2021 se compraron 36.111 furgonetas usadas. Estos datos reflejan que estos vehículos son muy populares en el mercado, y su compra está extendida en el uso comercial y en el personal.

Otras ventajas de comprar una furgoneta de segunda mano son:

Una amplia gama de marcas y modelos

Las furgonetas de segunda mano se caracterizan por su amplia gama de marcas y modelos para elegir el que más le convenga al cliente, según sus necesidades. Pueden encontrarse desde las más recientes y tecnológicas hasta las más tradicionales o de años anteriores.  A veces, los clientes suelen adquirir una furgoneta usada de la misma marca y modelo que vieron hace años atrás, y no pudieron permitirse dicha compra en su momento.

Garantía de calidad

Las furgonetas de segunda mano tendrán más o menos las mismas especificaciones técnicas que las opciones nuevas, si son modelos de años cercanos. Para hacer una compra segura, hay garantías de hasta un año después de la compra. En los concesionarios es más seguro comprarlas porque pasan por revisión y controles exhaustivos y rigurosas antes de colocarlo en venta.

Además, ofrecen certificado de kilometraje y la seguridad de que no tiene daños estructurales o cargas fiscales.

Precios más asequibles

Una de las mejores ventajas de las furgonetas de segunda mano es la disminución importante del precio. Son más asequibles que los modelos nuevos. En el mercado están las de precios altos y las que tienen precios mucho más bajos, depende del modelo, año y marca.

Mayor rentabilidad

Siempre será una buena opción que las empresas y autónomos inviertan en furgonetas de segunda mano. Sea cual sea el uso que va a recibir, si se compara el precio de cualquier furgoneta usada con una nueva, se logra una mayor rentabilidad; son de un 10 a 20% más baratas. También es más sencillo encontrar las piezas o repuestos en caso de que lo requieran después de varios años de uso.

¿Hay desventajas?

La única desventaja de las furgonetas usadas es que son vehículos con las comodidades básicas a la moda hace varios años. No tienen las mismas características tecnológicas que las actuales, aunque son las principales competidoras de otros coches SUV.